Importación de fertilizantes fuera de la ley, pone en riesgo ventas al exterior de productos agrícolas

 

  • Entran a México cargamentos de agroquímicos procedentes de China y la India sin la vigilancia obligatoria
  • México importa fertilizantes el 80 por ciento y el 20 por ciento restante es de producción nacional

 

En los últimos tres años se desató en México un desorden en la producción y comercialización de fertilizantes y plaguicidas, como resultado de la falta de vigilancia en importaciones de parte de instituciones gubernamentales, como son la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios, COFEPRIS, de la Secretaría de Salud, y del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria, SENASICA, de Agricultura y Desarrollo Rural.

El riesgo de este caos, dijo Rafael García del Horno, secretario de Finanzas de la Fundación Mejoremos al Campo, es en el sentido de que las autoridades sanitarias de los países que compran altas cantidades de productos agrícolas a México, sustenten contenidos de residuos tóxicos en frutas, hortalizas y legumbres, debido a la falta de revisión de estándares de tolerancia por parte de las autoridades sanitarias y agrícolas mexicanas.

Expresó que, en los últimos tres o cuatro años, surgieron muchas pequeñas y medianas empresas, no certificadas, que importan de manera indiscriminada materias primas de fertilizantes y agroquímicos que después envasan en México con marcas piratas. Muchos de estos productos son entre 20 y 40 por ciento más baratos que los de otras marcas certificadas, pero conllevan el riesgo de mantener residuos tóxicos para los consumidores, por la falta de análisis químicos en las formulaciones.

En México, manifestó García del Horno, se consumen anualmente alrededor de 5 millones de toneladas de diversos fertilizantes, en particular dominan los nitrogenados, con el 70 por ciento, los fosfatados con el 25 por ciento, y el resto corresponde a la base de potásicos y combinados. La cantidad de estos insumos es variable por razones económicas y de oferta restringida en nuestro país, sobre todo de parte de los pequeños productores. De plaguicidas, la materia prima se contabiliza en alrededor de 200 mil toneladas anuales, identificadas como fungicidas, insecticidas y rodenticidas, entre otros.

De fertilizantes se importa el 80 por ciento y el 20 por ciento restante es de producción nacional, con una tendencia a la baja, por falta de infraestructura. La mayor dependencia se refiere a los nitrogenados, debido a que son los de mayor uso en el país.

Los campesinos mexicanos representados por Rafael García del Horno, solicitan enérgicamente a las instituciones de gobierno, que apliquen las leyes y normas sanitarias autorizadas, y que se vigile estrictamente el origen y transporte de materias primas. Se sabe que entran a México cargamentos de estos agroquímicos procedentes de China y la India.

Sobre este mismo tema, el presidente de la Unión Mexicana de Fabricantes y Formuladores de Agroquímicos, UMFFAAC, Luis Eduardo González Cepeda, señaló que el valor del mercado nacional de fertilizantes y la dependencia de importaciones de estos insumos, hacen factible considerar la conveniencia de aumentar las inversiones públicas y privadas para su reactivación, mientras se avanza en la preparación de programas para que los pequeños y medianos productores del campo mexicano tengan acceso a los principales fertilizantes para aumentar calidad y productividad de sus tierras.