-Danza autóctona “La malinche” acaparó aplausos y reflectores en Ciudad Mante
Aquismón.- El colorido de la vestimenta y el despliegue de la danza autóctona “La Malinche San Juan Bautista” de Tancuime, Aquismón, acaparó la atención y con ello reflectores y cámaras en el reciente XXI Festival de la Huasteca, que reunió a representaciones culturales de seis estados de la república en Ciudad Mante; la asistencia se concretó gracias al acercamiento del Ayuntamiento -que encabeza la presidenta Yolanda Cepeda- con la Secretaría de Cultura de Gobierno del Estado.
El evento en mención se realiza cada año en primavera o verano desde 1996, de manera rotativa, en alguno de los municipios que forman parte de las huastecas de Hidalgo, Puebla, Querétaro, San Luis Potosí, Tamaulipas y Veracruz. Concentra a creadores, bailadores, artesanos, escritores, danzantes, promotores, cantantes, huapangueros, periodistas y demás personajes vinculados a la cultura; por esa relevancia y antigüedad, concentra cada vez a mayor número de visitantes.
Los danzantes llegaron a temprana hora en un cómodo autobús especial patrocinado por la Secretaría de Cultura estatal a través de su delegación regional, que otorgó todas las facilidades. Desde su arribo, el grupo de 38 hombres y mujeres llamaron la atención por las calles de Ciudad Mante, donde locales y foráneos pedían fotografiarse con ellos, sobre todo con las mujeres, quienes lucían la típica indumentaria tenek con su vistoso quesquem.
Después del desayuno, subieron cerca del mediodía al escenario principal, y pese al calor imperante la gente se concentró para verlos danzar durante un par de horas, en las que no cesaron los aplausos ni la concentración de asistentes, al grado que todas las sillas se llenaron. Las gráficas tomadas con teléfonos celulares de espectadores (entre ellos miembros de otras etnias), y cámaras profesionales de la prensa especializada y corresponsales, eran incesantes.
Posterior a su presentación formal, los aquismonenses bajaron del foro seguidos de una hilera de ansiosos turistas que deseaban tomarse con ellos la foto del recuerdo, lo mismo mientras paseaban por la plaza del lugar. Antes de ir a la comida, decidieron hacer una danza final, esta vez en el kiosco del jardín, que otra vez empezó a aglutinar a los seguidores que habían logrado cautivar minutos antes por su baile y las tonalidades de su traje.
Este año, del estado potosino asistieron los municipios huastecos de Valles y Aquismón. De éste último acudió la citada danza “La Malinche”, grupo formado hace casi una década como resultado de un cúmulo de inquietudes de indígenas tenek preocupados por mantener vigentes sus tradiciones; su propósito tomó forma cuando gestionaron y consiguieron apoyo de la Comisión Nacional Para el Desarrollo de Pueblos Indígenas (CDI) para uniformarse y equiparse.
Se integraron con pobladores de Tancuime centro y cuatro de sus barrios: Lanim, Oxtom, Pajamtzen y Tahuilatzen. Oficialmente tienen registrados 50 miembros, de los cuales 28 son mujeres y 22 hombres; de ellos uno toca el violín, otro la guitarra, y tres más las jaranas de distintos tamaños (dos chicas y una grande). Gregorio Bautista Cruz, el responsable de la agrupación admite que en algunos casos el contingente se reduce debido a enfermedad, fallecimiento u ocupaciones.
A lo largo de su existencia, la danza había recorrido diversos escenarios del estado potosino, a la que suman ahora su experiencia en el Festival de la Huasteca. Han cosechado diversas vivencias y satisfacciones, pero lo más importante para ellos es mantener vivas sus raíces, que perduran a pesar del tiempo y las edades, como sucede con don Crescencio Fernández, un bailador emblemático por haber llegado ya a sus 84 años de edad.
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