Durante los últimos doce meses, el empeño mayor del ejecutivo a mi cargo ha sido la continuidad…. Puntual y aplicadamente he procurado romper con el arraigado y mal hábito de la falta de continuidad, porque esta falla de la administración pública se traduce en desperdicio de recursos, obras inconclusas, proyectos sin fin y, lo peor, en frustración y desencanto social….
Este año continuamos dedicando nuestro mayor esfuerzo a los que más necesitan. Aun a riesgo de cierta incomprensión, vuelvo a subrayar que éste es un compromiso irrenunciable…. No es moda ni bandería política. Es, ya lo he dicho antes, un imperativo ético y un reconocimiento honesto de nuestras más difíciles realidades.…
Sin embargo, quiero enfatizar que no encuentro incompatible la construcción de una economía fuerte, diversificada y competitiva –como la que estamos impulsando en el estado– con la sensibilidad ante el dolor social de la pobreza, y con el ideal de futuro que late en el corazón de los potosinos menos afortunados….
Desde los altos cargos del gobierno es fácil caer en la tentación de esquivar la realidad…. Es todo un desafío no perder la brújula. Tengo claro que a San Luis Potosí le urgen muchas cosas, entre las que para mi destaca la urgencia de TENER MENOS POBRES, MENOS MARGINADOS, MENOS EXCLUIDOS.
Lo reitero y lo expreso con toda mi convicción, y ojalá ustedes lo acepten y comprendan: HAY CIERTO TIPO DE OBRAS COSTOSAS Y VISTOSAS QUE EN DETERMINADAS CIRCUNSTANCIAS SON UNA FORMA DE INJUSTICIA SOCIAL; sobre todo cuando tenemos comunidades agobiadas por las carencias más elementales.
Sin embargo, existe algo que podríamos denominar UNA ÉTICA DE LA CANTIDAD, en donde las pequeñas obras que están en la esperanza de la gente, acaban por configurar una obra enorme y útil que nos enaltece a todos, que nos abre el futuro a todos.
En sociedades con un progreso tan desigual como la nuestra, cada obra de pavimentación, de agua potable, de salud, de electrificación, de proyectos productivos, de impulso a la educación, la ciencia y la tecnología, son para muchos potosinos la oportunidad para experimentar la felicidad de prosperar; SON ALBORADA EN UN TIEMPO SOCIAL POTOSINO donde las hazañas de la modernidad no tienen por qué seguir coexistiendo perpetuamente con la amenaza cotidiana de la pobreza….
Sé que ustedes comprenden que si este gobierno ha tenido como prioridad número uno el combate a la pobreza, la marginación y la desigualdad, sería un grave error –administrativo, político, social y moral– incurrir en la falta de continuidad y dejar las cosas a medias, más cuando en el horizonte global aparecen turbulencias financieras que siempre terminan por apilar nuevos rezagos sobre nuestros viejos rezagos….
