* Coincide el diputado del GPPRD con militares presos en el sentido de que el gobierno violó sus derechos laborales
* Por ese simple hecho es improcedente una “ley de seguridad interior” como la que pretenden el PRI-PVEM, señala el legislador
México.- A un año de que el Subteniente de Infantería Jorge Alberto Tadeo Hernández se inconformara ante la Cámara de Diputados por el uso ilegal e ilegítimo de soldados mexicanos como policías para subsanar incompetencias e ineficiencias del gobierno federal, el Diputado Armando Soto Espino llamó a considerar los argumentos del militar para convencerse por qué no es necesaria una “Ley de Seguridad Interior”, como la que pretenden el PRI-PVEM o cualquier otro partido.
El presidente del Comité de Información, Gestoría y Quejas de la Cámara de Diputados recordó que el 27 de abril fue ingresada a la Mesa Directiva de este órgano legislativo el documento denominado “Manifiesto”, en el cual el Subteniente de Infantería, a nombre propio y de otros militares presos por el delito de “violencia contra las personas y otros”, denuncia que sus derechos fueron violados por el gobierno federal al haberlos utilizado en tareas para las cuales no estaban facultados legalmente, ni estaban capacitados laboralmente ni son propios de su naturaleza como militares.
“Por años, fuimos instruidos para ser soldados, y de un día para otro comenzamos a realizar actividades de índole policial, que estábamos lejos de comprender a cabalidad. Quien conozca la naturaleza de un Ejército, entenderá la ingente confusión que ha existido desde que comenzamos a suplantar las funciones de las policías”, señala el preso del Campo Militar Uno, en la Ciudad de México.
En su escrito, el soldado se queja de que, de ser entrenado para defender la integridad, independencia y soberanía nacional; así como auxiliar a la población civil en casos de necesidades públicas, realizar acciones cívicas, obras sociales que tiendan al progreso del país, ayudar al mantenimiento del orden y reconstrucción de las zonas afectadas en casos de desastre, entre muchas otras, ahora está encarcelado por considerársele criminal, cuando no hizo otra cosa que acatar órdenes en el marco de la disciplina a la que estaba obligado.
El Subteniente de Infantería, Tadeo Hernández cita la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; leyes orgánicas y reglamentos de las Fuerzas Armadas Mexicanas; textos de especialistas y académicos; recomendaciones de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos; entrevistas al General Secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos Zepeda; tratados internacionales signados por México, y hasta “El Principito”, de Saint Exupery, para demostrar “que sólo hay que pedir a cada uno lo que cada uno puede dar” y que haberle pedido a los soldados ser policías fue ilegal, indebido e irracional.
Para ilustrar cómo el gobierno federal violó la ley desde el sexenio de Felipe Calderón Hinojosa, señaló que fue casi al final de su administración –el 23 de abril de 2012- cuando emitió la “directiva que regula el uso legítimo de la Fuerza por parte del personal del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos en cumplimiento del ejercicio de sus funciones en apoyo de las autoridades civiles y en la aplicación de la Ley Federal de Armas de Fuegos y Explosivos”, pero para entonces ya había muchos militares presos por no haber sido capacitados en dicha directiva extemporánea.
Por otra parte, en su exposición describió cómo, en un día de trabajo para el personal del Ejército en Apoyo de la autoridad local, son los soldados quienes prácticamente hacen todo mientras la policía y el Ministerio Público se desentienden de sus obligaciones y sólo aparecen para festejar los triunfos como propios o para sancionar a los militares cuando son acusados de violaciones a los Derechos Humanos.
El Subteniente de Infantería reconoce en su escrito que muchos militares están presos porque, por disciplina, hicieron mucho más de lo que legalmente debían; oficios en donde se ordena “abatir delincuentes en horas de la oscuridad”, “disparar a vehículos que no se detengan a inspección y a los cuales se persiga”.
“¿Cómo han de respetarse los derechos de los civiles con semejantes órdenes?”, cuestionó el militar al pedir que, en todo caso, se someta a juicio a quienes dieron esas órdenes –entre ellos, el presidente de la República-, pues en todo caso son los verdaderos responsables.
“Así pues, al ordenar el Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas –el presidente de la República- que las tropas salieran a las calles, dio una orden que se cumplió, pero donde los más afectados fueron las bajas colaterales, es decir, civiles inocentes y los militares de baja graduación que estuvieron en primera fila en el cumplimiento de esa orden”, hoy son tratados como delincuentes en eternos procesos judiciales.
Por su parte, el Diputado Armando Soto Espino exhortó a la Cámara de Diputados a tomar muy en cuenta el reclamo del Subteniente Tadeo Hernández. “Una de las mayores preocupaciones de los mexicanos es la inseguridad pública. En este sentido, debemos fortalecer nuestras instituciones y proteger a los mexicanos, así como defender a nuestros soldados”, dijo.
