A fin de evitar la transmisión de enfermedades gastrointestinales por consumo de agua contaminada, se intensificaron en las últimas semanas las acciones del programa “Agua de Calidad” toda vez que el consumo de este recurso natural se incrementó por las altas temperaturas.
Las actividades se intensifican durante los meses cálidos y consisten en monitoreo de cloro residual permanente en la red pública, así como a los sistemas formales de abastecimiento de agua para su uso y consumo, verificaciones a pipas, toma de muestras para análisis bacteriológicos, físico químico y la búsqueda intencionada del Vibrión del Cólera en aguas blancas y negras.
Como parte de las acciones preventivas, se otorgan pláticas a la población a través de los Centros de Salud, sobre la adecuada limpieza y desinfección de tinacos o aljibes.
En cumplimiento a la norma que establece que el agua potable debe estar clorada en un margen de 0.2 y 1.5 miligramos por litro, actualmente la cobertura de cloración de agua potable en el estado es del 99.98 por ciento.
En la vigilancia sanitaria a pipas, se supervisa que el tanque se encuentre en condiciones óptimas, que no cuente con fugas, que el agua este clorada como marca la norma y que los costados del tanque cuenten con la Leyenda Agua Potable.
