-Intenta eternizarse en el cargo se venció su periodo el pasado 1 de diciembre
-Ningún dirigente puede estar por encima de los “Estatutos cañero”
Tamasopo.- Con el solo hecho de negar el acceso al edificio propiedad de los socios de la Asociación de Cañeros CNPR de Alianza Popular, no solicitar convocatoria para renovar dirigencia un mes antes de que se termine su periodo e intentar con recursos de la agrupación acabar con el movimiento cañero para elegir nueva mesa directiva, los socios pueden destituir a integrantes de la actual mesa directiva.
De acuerdo a declaraciones de socios de la ALPC-CNPR de Alianza Popular, con tiempo suficiente se dio a conocer y se solicitó permiso a los dirigentes cañeros salientes, prestaran el salón de juntas para llevar a cabo una reunión extraordinaria, luego que no se emitiera la convocatoria para renovar mesa directiva la cual se realizaría el 18 de diciembre, sin embargo los socios llegaron a las oficinas CNPR pero se encontraron que las instalaciones estaban atrancadas.
Esta situación género la molestia de los socios cañeros, quienes evocando los estatutos de la agrupación, en que se establece con el 25% del padrón se puede convocar a asamblea extraordinaria.
En este caso, el domingo 18 de diciembre, alrededor de 300 productores tomaron el acuerdo de enviar una segunda convocatoria para que en la próxima los acuerdos puedan tener efectos legales, reunión que se sostuvo afuera de las instalaciones.
Sin embargo en la reunión expresaron la urgencia de convocar a elecciones y librarse de la actual directiva que ha sido muy decepcionante y cara, por lo de no conseguir la convocatoria deberían ser destituidos en la próxima asamblea señaló Demetrio Morín.
Así mismo, Arturo Camacho , manifestó que es indignante el hecho de haber realizado una fuerte campaña por periódicos, radio y casa por casa con los empleados de la agrupación que deberían andar apoyando la cosecha, para evitar a toda costa que no asistieran los socios a la reunión.
Cañeros que participaron en esta reunión, indicaron que “La agrupación no le pertenece a Baltazar Peña ni a Víctor Alanís, es de los productores a quien les merecen respeto, no pueden usar nuestro dinero para suprimir un reclamo justo derivado de su mediocre acción como directivos”.
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