El Partido Verde propone revisar el marco jurídico para mejorar las políticas y programas de salud mental para niños y adolescentes con el objetivo de mejorar los sistemas de atención y evitar que sean ineficaces, costosos e inaccesibles.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la depresión, la esquizofrenia y el trastorno obsesivo compulsivo se encuentran entre las diez principales enfermedades de mortalidad prematura. Además, en el 2020, la depresión ocupará el segundo lugar como discapacidad mundial, actualmente existen aproximadamente a 121 millones de personas afectadas en el mundo.
De acuerdo con esta organización los trastornos depresivos comienzan en edades tempranas y tienen como principales factores de riesgo el género (es de dos o tres veces más común en las mujeres), la pobreza, el bajo nivel educativo, la exposición a la violencia y las enfermedades crónicas.
En los adolescentes, el suicidio es la tercera causa de muerte, los trastornos depresivos tienen inicio en la adolescencia; el 20 por ciento de niños y jóvenes padecen trastornos mentales o son víctimas de violencia física o sexual y los trastornos conductuales perduran a lo largo de la vida, manifestándose en el consumo de drogas, delincuencia y conducta antisocial.
En México, según estadísticas, una de cada 10 personas padece depresión y sólo uno de cada cuatro recibe tratamiento. El 28.6 por ciento de la población ha presentado alguna vez algún trastorno mental; el 13.9 por ciento los ha presentado en el último año y el 5.8 por ciento en el último mes.