UNIVERSIDADES CERTIFICAN A RESPONSABLES DE LAS CONTRALORÍAS INTERNAS MUNICIPALES

* San Luis Potosí es el único estado en el país con un esquema integral de certificación que responde a la realidad de los municipios.
* Actualmente más de 360 funcionarios cumplen con un programa de certificación para 7 puestos de la administración municipal: tesorero, contralor, secretario del Ayuntamiento, coordinador de desarrollo social, coordinador de desarrollo rural, obras públicas y oficial mayor.
San Luis Potosí.- Ante la serie de controversias que surgen en el cargo de contralores municipales, la Coordinación Estatal para el Fortalecimiento Institucional de los Municipios impulsa -en vinculación con universidades- cursos de certificación, lo que constituye un modelo innovador único en el país que permitirá incrementar la profesionalización del servicio público municipal.
El Coordinador Estatal para el Fortalecimiento Institucional de los Municipios, Luis Gerardo Aldaco Ortega, refirió que se trata de un compromiso de los 58 municipios, ya que en la actualidad existe una sociedad más informada que demandan a sus gobernantes mayor preparación académica, además de apertura y claridad en la rendición de cuentas.
A la fecha, -agregó- 55 personas cursan en universidades de todo el estado la currícula de formación para contralor Municipal, mientras más de 300 se preparan en 7 puestos de la administración municipal: tesorero, contralor, secretario del Ayuntamiento, coordinador de desarrollo social, coordinador de desarrollo rural, obras públicas y oficial mayor, además de los servidores que desempeñan cargos de confianza en los municipios.
“Es una acción encaminada a la profesionalización y a la generación de buenas prácticas de gobierno”, señaló el funcionario estatal.
Finalmente, expresó que de acuerdo a las reformas en la Ley Orgánica del Municipio Libre en el tema de Contralores, “quedaría pendiente en la mesa de análisis definir los mecanismos para garantizar la independencia técnica y de gestión de las Contralorías Internas, lo que finalmente se traduciría en una adecuada vigilancia de los recursos municipales, mejorando con ello la calidad de vida de los habitantes, la cohesión social, y el desarrollo integral de los Ayuntamientos”.