-Desacredita auditoría, gasto del primer año de gobierno de AMLO.
- Entrega ASF a diputados, Informe Preliminar de la revisión de la Cuenta Pública 2019. En noviembre habrá un complemento, adelanta el perredista Antonio Ortega
- Este será el “documento base” que la Comisión de Presupuesto estudiará y revisará para elaborar un dictamen y emitir opinión sobre la gestión y cumplimiento de metas y programas ofrecidos por gobierno de AMLO, a partir del gasto aprobado por diputados, dice
- Gastos en burocracia de la 4T superaron a los que se hicieron en 2018. De cada cien pesos ejercidos en 2019, solo 12 fueron para infraestructura. Poder Judicial efectuó los mayores ahorros con el 90.4% del total de la Administración; mientras que Ejecutivo y Legislativo economizaron solo el 8.5%
- Las falsas acciones de que han derivado en la “austeridad franciscana”; lucha contra la corrupción y combate a la baja recaudación, fueron discursos demagógicos, mentiras de “ahorros” que no se comprueban en la cuenta pública revisada, afirma
México.- El Partido de la Revolución Democrática en la Cámara de Diputados dio a conocer que la Auditoría Superior de la Federación (ASF) entregó un Informe preliminar del Resultado de la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública 2019, correspondiente a los primeros meses del primer año de gobierno de Andrés Manuel López Obrador y -de acuerdo con los resultados obtenidos- el fracaso de las estrategias de combate a la corrupción y de austeridad, repercutió para que la economía nacional quedara estancada.
“En 2019, el gobierno desapareció plazas y dejó en el desempleo a más de ocho mil funcionarios de mandos superiores con responsabilidades y conocimientos estratégicos en la conducción del país. Despidió a más de 60 mil trabajadores con puestos básicos; canceló nuevas contrataciones, dejó en ‘huesos’ la operación –prácticamente- de la administración reduciendo salarios y prestaciones y, ese enorme sacrificio a la administración pública, ese golpe letal a la eficacia y eficiencia del aparato administrativo, no se pudo traducir en recursos extra que ayudaran a atender las demandas sociales”, acusó Antonio Ortega Martínez, diputado federal por el PRD y secretario de la Comisión de Hacienda en el Recinto legislativo de San Lázaro.
El también integrante en la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, adelantó que la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior recibió de manera preliminar, el análisis de la ASF, cuyo complemento será entregado en noviembre próximo con lo que se tendrá la revisión completa de la gestión del primer año del Presidente López Obrador.
Éste, explicó Ortega, será el “documento base” que la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública deberá estudiar y revisar para elaborar un dictamen y emitir una opinión política sobre la gestión financiera, y -de manera especial- el cumplimiento de las metas y programas ofrecidos por el Ejecutivo mediante el ejercicio del gasto que le aprobó el Legislativo.
“¿El gasto sirvió o no para cumplir objetivos y metas, y atender demandas y problemas que reclama la población?”, cuestionó el diputado y precisó que el Presidente López Obrador ha insistido en que impondría un sello distintivo a su administración, que no habría un ‘gobierno rico con pueblo pobre’; y trazó una serie de políticas que -en conjunto- permitirían lograr ahorros por 800 mil millones de pesos, lo cual no se cumplió.
Ortega afirmó sin embargo que, de acuerdo con este primer reporte de la ASF, de cada cien pesos que ejerció el gobierno Federal en 2019:
- 29 fueron para servicios personales;
- 5 para gastos de operación;
- 20 para pensiones y jubilaciones;
- 9 para subsidios; y (lo grave)
- 12 para inversión física e infraestructura.
¿De qué estamos hablando? – especificó Ortega- de que todos los recortes, el sacrificio, los discursos, los ofrecimientos y promesas; en la realidad, revisados los documentos, evaluado el gasto frente a los objetivos y metas, estuvieron por debajo de lo hecho en 2018.
Los recursos aprobados por la Cámara de Diputados para la llamada “4T” no se tradujeron en una mayor inversión en infraestructura física, ni en gasto que estimulara a la economía al grado tal que estuvo por debajo en 103 mil millones de pesos frente a lo erogado el año previo al inicio de la gestión de AMLO.
“La Auditoría Superior califica esto como una estrategia fallida en el gasto y contribuyó en gran medida, al nulo crecimiento en el 2019 (que, prácticamente, todas las entidades que hacen evaluación, hablan de una caída superior al -3 por ciento). Es decir: Los programas de austeridad y de lucha contra la corrupción, se convirtieron solo en discursos demagógicos, mentiras. No pudieron confirmarse ni comprobarse los ahorros”, citó.
“No pudieron demostrar ni comprobar los recursos dedicados a la infraestructura y a la atención de los problemas”, censuró el legislador.
Lo que la Auditoría Superior apenas pudo encontrar, agregó, fue que el Poder Legislativo (diputados y senadores encabezados por la mayoría de Morena) y el Ejecutivo (dirigido por López Obrador) apenas recortaron el equivalente al 8.5 por ciento (los ahorros de Presidencia fueron de 393.14 millones de pesos); en tanto que el Poder Judicial (hay que reconocerlo) aportó el 90.4 por ciento”.
Esta política de “cambio” en la administración pública de “mayor eficiencia con menor gasto” sin duda, fue demagógica, “atole con el dedo”; remató Ortega Martínez.
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